Hay una embravecida tormenta en el mar. Olas infernales chocan y golpean la ribera, llevándose todo en su camino, dejando solamente desolación tras su paso.
El mar es el mundo del trabajar para hacerse una vida. Las olas son la tensión y ansiedad de la indecisión, el no saber que camino tomar, en que confiar. Arriba y abajo, caliente y frío -agitándose constantemente una y otra vez.
Has como hizo Noé y construye un arca. “Un arca” en hebreo es taiva, que también significa “palabra.” Tu arca será las palabras de meditación y oración. Entra en tu arca, y deja que las aguas te levanten, en lugar de ahogarte junto a todo lo demás.
Por Tzivi Freeman, Jabad
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